Este documental fue ordenado por el Gobierno norteamericano,
para explicarle a su población por qué debían pelear contra Alemania y Japón. En
el film se evidencia el plan de dominación territorial Nazi y su filosofía.
El nazismo se fundamentó en el control de los actos y de la
mente de los ciudadanos a través de la eliminación de la libertad. El gobierno ejerció la dominación total de
todos los ámbitos de la vida de los ciudadanos. Vemos en el film que a través de la Geopolítica y la
Propaganda Nazi, implementadas a través de
funcionarios leales y eficientes como Haushofer y Goebbels, encargados de poner
en práctica estas 2 ramas fundamentales para el nacionalsocialismo, el Estado
pudo manipular, amedrentar, controlar y expandir su imperio. Con la Geopolítica, como lo explica Capra en el film, los nazis buscaban el control militar del
espacio. Los individuos no eran vistos como sociedad y seres humanos con ganas
de progresar sino como Mano de obra y materia prima, para sus propósitos de controlar
el mundo. Michael Oakeshott, plantea en “El
racionalismo en la política” que el racionalista “no cree en la educación a través
de los logros y hábitos morales e intelectuales
de su sociedad” solo cree en el adiestramiento técnico, generado por la razón,
que solo atiende a una verdad absoluta y que también depende de las
circunstancias en la que se encuentre.
Hitler utilizó una filosofía excesivamente racionalista. Dió
argumentos y “razón” para justificar sus actos y su doctrina. Se autodenominó
como el Dios o Führer Alemán. En el documental podemos observar cómo se sometió
a la sociedad alemana, a los designios
del líder sin cuestionar sus actos, sus mensajes eran claros “dejen que las democracias hablen de libertad,
aquí no habrá sindicatos, no habrá horas extras. El Führer les dirá donde
trabajar, cuánto vale su trabajo, construyamos esta arma con sangre y acero.
Hoy gobernamos Alemania y mañana el mundo entero”. Oakeshott, plantea que esta filosofía en lo que se refiere al conocimiento humano equivale a la “corrupción
de la mente” es el hecho de vivir solo por un precepto y que finalmente
generará una “deshonestidad intelectual”.
Además dice que para el racionalista “se
reconoce la actividad política como la imposición de una condición uniforme de
perfección sobre la conducta humana”
Oakeshott también sostiene que “el racionalista es un personaje peligroso y caro cuando controla los
asuntos” y es precisamente en lo
que se convitió Hitler y su el gobierno al crear una política personalista, totalitaria, militarista y racista. Nadie podía
negarse a colaborar porque sería exterminado, asimismo todos los ciudadanos que
tenían sangre alemana que estuvieran por el mundo le pertenecían al Tercer Reich.
Era la eliminación absoluta de la libertad individual.
Hitler para llegar al
poder y convencer al pueblo de seguirlo se valió de la crisis económica y
social y la gran depresión que vivía Alemania
después de la I Guerra Mundial, además acrecentada por la crisis mundial de
1929. Aunado a esto existía descontento de la población con los partidos comunista
y socialdemócrata y con la democracia. Se presentó ante la sociedad como un salvador que
tenía la solución a los problemas. Creó un partido político (Partido – Estado)
sustentado en el nacionalismo. Centralizó el poder. Utilizó argumentos para
crear el odio entre unos y otros. Adoctrinó a una generación nueva al servicio
de sus pretensiones conquistadoras. Ofreció estatus a hombres corruptos y creó élites dispuestas a secundarlo en todos sus planes para no perder sus
privilegios. Amedrentó a través de la fuerza y el terror a quienes no lo
siguieran. Ideó una legislación al servicio del régimen y su partido nazi. Fabricó
un falso enemigo en cada guerra y los hizo creerse superiores a los otros seres humanos,
la denominada raza aria.
Hitler se saltó toda legalidad tanto dentro de Alemania como
fuera, violó tratados y acuerdos internacionales como el de Versalles (1919),
en el film se narra como “los alemanes siempre ignoraron los tratados” y muestra como este hombre a través del engaño y
haciendo caso omiso a los pactos se apodera de Europa Oriental (Austria,
Checoslovaquia y Polonia). Con un plan muy bien diseñado se infiltró en las
ciudades a través de sus organizaciones subversivas, para desestabilizar y con su poderío armamentista invadió ciudades que
no estaban preparadas para los ataques.
Este documental no solo muestra el plan nazi, su falta de etica, crueldad e inmoralidad, sino también el
coraje de pueblos enteros para luchar contra su dominación. Asimismo evidencia
como los países con fuertes convicciones democráticas no se sometieron a los designios alemanes y
lucharon hasta el final, al contrario de lo dicho por uno de los portavoces
nazis citado en la película el Dr. Ernt Hanftstaengl “La democracia no tiene
convicciones por las que el pueblo esté dispuesto a arriesgar su vida”
Muy bueno, la postura del documental es bastante neutra, me gustó, Why we fight, es de las propuestas que logran entretener pero también cautivar al espectador al tiempo que expone la verdadera razón de estas guerras "por la democracia" no es otra cosa que la riqueza, siempre la riqueza, el móvil del capitalismo. Esta opción me recordó mucho al pequeño documental llamado Vice, una mirada a lo que acontece en el mundo actualmente, de verdad vale la pena echarle un vistazo.
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